lunes, 12 de abril de 2010

Protagonista, no víctima

Hoy es el dia del reencuentro con la sabiduría de las ganas y el corazón, donde hay que provocar un verdadero cambio en la forma de vivir, hoy ya no vamos a esperar que Dios, Mahoma, o la energía, nos haga el milagro. Hoy tenemos nosotros que hacer que las cosas sucedan, hoy vamos a ser los creadores del milagro en nuestro trabajo, vida, y existencia.

La espera terminó, es momento de responsabilizarnos, de dejar de culpar a los personajes, culturas, religiones, ideas que conforman nuestras historias de vida por todo aquello que ha o no ha acontecido en las nuestras. Hoy nuestro corazón y fuerza se abre y despierta a la sabiduría que lo habita, el poder de aquellos que veían una sociedad dormida, amedrentada, se termina en cuanto cada quien se responsabilice de su vida, ya no habrá sistema que te imponga creencias, cuyos sustentos están muy lejos de la intención de un corazón abierto, si no muy al contrario son corazones con miedo, los que se imponen, por querer encontrar en el control de los demás, su leyenda personal, donde "creen" que el poder, los contactará con su paz, con su armonía, con su sentido de pertenencia, con su felicidad.

Nunca es demasiado temprano para descubrir nuestras cualidades internas y engrandecerlas. Hay que hacer a un lado la pereza, para que la transformación interna suceda y de ahí nos daremos cuenta que todo lo que buscábamos afuera, estaba mucho más cerca, solo en él reencuentro con nuestra verdadera esencia podemos encontrar todo lo anhelado por el ser humano, partiendo de este reencuentro el camino nunca más vuelve a ser incierto, ahí está el milagro, es a través del descubrimiento de mi tesoro interno, de la conexión con todo lo bueno y verdadero que me pertenece, donde la luz en mi vida se enciende y a partir de ahí todo recobra sentido.

Bienvenido a la aventura de recuperar el timón de tu barco, a la aventura de volverte hoy el protagonista de tu vida y nunca más la victima de tu historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario